viernes, 26 de marzo de 2010

Honrar el matrimonio

Efesios 5:25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio a sí mismo por ella,
1Pedro 3:7 Y vosotros, maridos, igualmente, convivid de manera comprensiva con vuestras mujeres, como con un vaso más frágil, puesto que es mujer, dándole honor como a coheredera de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no sean estorbadas.


El primer matrimonio que hubo desde la creación, lo vemos en (Génesis 2:24) "Por tanto el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne." En este versículo vemos los tres puntos básicos del matrimonio, (1) El hombre"deja" a su padre y a su madre y , en un acto público, se promete a su esposa. (2) El hombre y la mujer se "unen" al tomar la responsabilidad del bienestar de cada uno y al amar a su pareja sobre todo lo demás; (3) Ambos llegan a ser "una carne" en la intimidad y el compromiso de la unión sexual que está reservada sólo para el matrimonio.




En el nuevo testamento Jesús confirma estas palabras y le agrega una advertencia muy importante en (Mateo 19:3-6) "Por consiguiente, ya no son dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe.". Cristo con estas palabras está dando al matrimonio un valor y una importancia muy grande, cosa que en los países llamados cristianos de hoy lo ha desvalorado, mostrando el bajo estado moral de éstos.
Desde el principio la Palabra dice; (Génesis 1:31) "Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y fue la mañana: el sexto día." todo lo que Dios creó y quiso para el hombre y la mujer es bueno en gran manera, y el matrimonio tiene el mismo propósito, hacernos felices.


La unión libre, el adulterio y el divorcio, son los causantes de los sufrimientos de los cónyuges y los hijos. Cuando el matrimonio se divorcia está ofendiendo gravemente a Dios, pues Él es el que lo constituyó.



(Efesios 5:22-23) "Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos como al Señor. Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, siendo El mismo el Salvador del cuerpo." Este pasaje refleja el matrimonio del hombre y la mujer, como la unión de Cristo (esposo) y la iglesia (esposa). El matrimonio a de buscar ser instruido por las enseñanzas que hay en la Palabra, debe ser consciente de la debilidad, buscar de la oración y la lectura de la Palabra para fortalecerse y se mantengan fieles, para ser uno en Cristo en la tierra.

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